En educación básica, la escuela secundaria es considerada como etapa propedéutica para el alumno ya que al término de tres ciclos escolares debe decidir hacia qué área productiva enfocarse. La educación secundaria es entonces concebida como fundamental para el desarrollo sano e integral del adolescente.
Sin embargo, es de todos sabido que la escuela secundaria sufre una marcada crisis puesto que las adecuaciones que debieran formularse en este nivel para lograr la calidad requerida al egresar el alumno, no se han puesto como debieran en marcha., por ende, no se logra hacer tangible en esta etapa, su calidad y pertinencia.
Las transformaciones que urgen de manera alarmante en la enseñanza secundaría van desde la reestructuración académico-curricular del nivel hasta la construcción de una propuesta de reforma estructural que abarque en gran medida lo siguiente:
1) Revisión y reformulación de los contenidos en los programas y objetivos de cada materia.
2) Reformar la metodología para la evaluación objetiva.
3) Analizar verdaderamente y a fondo desde la comunidad escolar hasta la colectividad local lo que la sociedad requiere.
4) Revisar la manera en que se da el financiamiento a este nivel con la finalidad de ampliar y reestructurar las partidas presupuestales y así dotar debidamente a los planteles de laboratorios, aulas, talleres, salones de computo, bibliotecas, entre otros.